Es inevitable mencionar Navidad y no relacionarla con el consumo de pavo, y es que es difícil pensar en la cena navideña sin que sea preparado.

Ahora, la duda que tenemos es, ¿de dónde viene esta tradición?

Esta costumbre no es propia de Ecuador, su origen es extranjeo y usualmente se sirve acompañado de guarniciones como arroz, ensalada y papas.

La historia de su consumo comenzó en México antes de la conquista y evangelización, cuando los aztecas consumían “Guajolote” (pavo) para rendir culto a sus dioses en invierno. Su popularidad fue tanta que llegó a Europa por los conquistadores españoles, quiénes lo llamaban Gallina de Indias y posteriormente pavo. Todo esto sucedió en su paso por América, ellos lo adoptaron para luego verlo como un manjar exclusivo con el fin de disfrutar las fiestas con un alimento destacado por sabor y tamaño.

En Ecuador, antes de adoptar esta tradición navideña, se consumía caldo de gallina, cerdo y pollo. Pero con el paso del tiempo y el ingreso de extranjeros al país, el consumo de pavo en las mesas ecuatorianas, en diciembre, se popularizó cada vez más hasta normalizarse, y ahora quién se imagina la cena de Navidad sin pavo.

Por otro lado, se cree que su popularidad en Estados Unidos se dio gracias a los colonos de Massachusetts en el año de 1621, fecha en la que se solía consumir esta carne para celebrar la cosecha en otoño, o la temporada mejor conocida como Día de Acción de Gracias.

Aunque muchos desconocemos de la historia del consumo de pavo en Navidad, hoy resulta impensable festejar las fiestas sin esta exquisita carne. Por eso, en este artículo, además de contarte su origen, también te compartimos 4 recetas que no podrán faltar en tu mesa este diciembre.Prepárarlas en familia.